Las tres nuevas estaciones de la pasante ferroviaria se situarían en las inmediaciones de la plaza Easo -la caverna de la estación subterránea se ubicaría más hacia Morlans-, cerca del hotel Londres, en la plaza Xabier Zubiri y en las proximidades del polideportivo de Benta Berri, y se sumarían a las ocho que tiene el Topo en San Sebastián en la actualidad.
Con la nueva solución, la plaza Easo dejaría de ser un fondo de saco y los trenes podrían proseguir hacia La Concha y El Antiguo, al igual que los que llegan a Lugaritz, que podrían seguir hacia el hotel Londres, Easo, Anoeta y el este de la ciudad hasta llegar a Irún.
El coste total de esta nueva propuesta de trazado subterráneo entre Easo y Lugaritz, de 4,15 kilómetros de longitud, asciende a unos 165 millones de euros, incluidos la obra civil y los equipamientos interiores, veintidós millones menos que el presupuesto previsto en el proyecto anterior. Si la nueva propuesta sigue adelante, el plazo de arranque de los trabajos se situaría en el año 2016 y la ejecución podría durar tres años y medio, con lo que no sería realidad antes de 2020.
Tres nuevas estaciones
En el nuevo diseño se suprime la estación de Antiguo-Matía y se mantienen las de Easo, Centro-La Concha y Benta Berri. Además de la supresión de una de las estaciones, el nuevo diseño contempla que la parada cercana al hotel Londres no solo tenga acceso por la calle Loyola y la plaza Xabier Zubiri, sino que contaría con un tercer acceso, que saldría al inicio de la cuesta de Aldapeta, para unirse con el nuevo desarrollo de San Bartolomé.
Propuesta de tres nuevas estaciones en Donostia. (Diario Vasco) |
Por su parte, el acceso de la estación subterránea de Easo se acercaría más hacia el barrio de Morlans y contaría con una boca de acceso por la calle Autonomía y otra en la esquina de la calle Azpeitia con el paseo de Errondo.
Finalmente, la tercera estación, que serviría tanto para Benta Berri como para el entorno universitario, se construiría bajo las antiguas viviendas de la avenida de Zarautz y tendría dos accesos. El primero de ellos se abriría por esta avenida, junto a las canchas deportivas, muy cerca de los ascensores públicos de Aizkorri y el segundo, al final de la calle Matía, en la plaza de Benta Berri.
Nuevo punto de ataque de la obra
Otro de los cambios propuestos en el nuevo diseño elaborado en el último año por los técnicos del Departamento de Transportes del Gobierno Vasco es que el ataque de la obra no se efectuaría por la mitad de La Concha, como estaba previsto, sino por el paseo de la Fe, en Miraconcha. Esta solución aleja el trazado de la costa, tanto para evitar problemas derivados de las mareas, como para no entorpecer el tránsito peatonal de esta zona, especialmente en verano.
El punto de ataque del paseo de la Fe sería el intermedio por el que comenzaría la perforación del terreno para crear el tubo por el que circularían los trenes. Los otros puntos de arranque del nuevo subterráneo se situarían en el entorno de Lugaritz y Easo-Morlans.