Estos Centros son los responsables de la gestión, supervisión y regulación del tráfico ferroviario de las líneas Madrid-Sevilla, La Sagra-Toledo, Córdoba-Málaga, Madrid-Levante, Orense-Santiago, Madrid-Valladolid y Madrid-Barcelona-frontera francesa.
El contrato, adjudicado a la empresa Indra Sistemas por un periodo de veinticuatro meses, engloba el mantenimiento tanto preventivo como correctivo de los sistemas de gestión centralizada, necesarios para asegurar la disponibilidad y fiabilidad de los sistemas que intervienen en la actividad de los CRC.
De esta manera, son objeto de mantenimiento los equipamientos, sistemas y entornos informáticos instalados tanto en los CRC como en los Puestos Regionales de Operación (PRO), edificios técnicos de líneas de alta velocidad y estaciones.
Cinco CRC para alta velocidad
En la actualidad existen cinco CRC para alta velocidad. El de Puerta de Atocha, que ejerce de centro neurálgico para toda España; el Gutiérrez Soto, ubicado en Zaragoza, para la LAV Madrid-Barcelona-frontera francesa; un tercero situado en Antequera para el seguimiento de la línea Córdoba-Málaga; el ubicado en Albacete para gobernar la línea de alta velocidad Madrid-Cuenca-Albacete-Valencia/Alicante y, por último, el de Segovia para el trayecto Madrid Chamartín-Valladolid, como respaldo del CRC Puerta de Atocha.
Estos Centros suponen una respuesta a las necesidades de la gestión del tráfico de alta velocidad, que se han concretado en el desarrollo de la Plataforma Integradora de Tráfico Ferroviario Da Vinci, de diseño español y propiedad intelectual de Adif.
Así, la señalización, electrificación, comunicaciones, información al viajero, energía y seguimiento son centralizados por la plataforma para que crucen e intercambien información, permitiendo además su monitorización remota en los CRC centrales.