El metro automático ha sido
construido por un consorcio formado por Ansaldo STS (sistemas
ferroviarios, control de trenes, suministro eléctrico),
Ansaldobreda (material rodante) y Astaldi (obra civil), mediante un
contrato llave en mano por valor de 575 millones de euros,
adjudicado en abril de 2003. El metro de Brescia incorpora la
tecnología sin conductor que introdujo el consorcio liderado por
Ansaldo en la primera fase del metro de Copenhague, capital de
Dinamarca, inaugurado en 2002.
El metro de Brescia dispone de diecisiete estaciones, de
las que trece son subterráneas, dos en superficie y dos
elevadas. Varias de las estaciones bajo la superficie están
diseñadas en forma de galería para permitir la entrada de la luz
natural al andén. Todas las estaciones incorporan puertas de andén
de Knorr-Bremse y marquesinas elevadas para proteger las
líneas.
En túnel y en
superficie
Existe un punto de intercambio con la red ferroviaria en Stazione
FS; la estación de metro aquí situada, Vittoria, está ubicada en el
centro de la ciudad, cerca del distrito comercial. De los 13,7
kilómetros de longitud de la línea, seis discuerren por
un túnel con dos galerías, excavado con tuneladora, otros 4,7 son
en trinchera, 1,3, en superficie y 1,7 kilómetros, en
viaducto.
Ansaldobreda ha suministrado dieciocho unidades articuladas
de tres coches basadas en el mismo diseño que las del metro de
Copenhague. Con una anchura de 650 milímetros, cada unidad tiene
capacidad para trescientos pasajeros, con 72 plazas de
asiento.
El metro lo gestiona la autoridad de transporte local Brescia
Mobilitá, bajo el nombre Metrobus. Los intervalos de servicio van
desde seis minutos en las horas punta de la mañana a los diez
minutos de las tardes y los domingos.