Grafitis y rayaduras, vidrios
rotos, luminarias y plafones desprendidos se cuentan entre
los estragos cometidos por parte de personas inescrupulosas.
Asimismo, resultaron dañadas las manecillas de las puertas de
intercirculación y las agarraderas de los trenes. También
resultaron desprendidas gomas y rejillas de los ductos de aires
acondicionados.
En total fueron 10 los trenes de
línea 1, 3 los de línea 2 y 2 de línea 3 los que resultaron
afectados. Con relación a las escaleras mecánicas desde el lunes se
comenzó la intervención de 3 de las que resultaron afectadas.
Los hechos ocurridos ameritaron la
desincorporación de las unidades para su respectiva reparación y
mantenimiento.
Un operador
lesionado
El día lunes en la tarde un
operador recibió un golpe en la cabeza con una patineta por parte
tres usuarios, lo que le ocasionó herida abierta en la frente y
contusiones en brazos y espalda. El hecho ocurrió en la estación
Ciudad Universitaria. El trabajador fue trasladado por los Bomberos
del Distrito Capital a un centro asistencial y los agresores fueron
aprehendidos por efectivos de la Policía Nacional Bolivariana
(PNB).
La Gerencia de Seguridad de la
empresa aplicó medidas como el cierre de accesos en las estaciones
donde se generaron hechos violentos, como Plaza Venezuela, Sabana
Grande y Chacaito, para controlar el flujo de usuarios. Además se
procedió a la retención de tánganas y objetos que pudieran atentar
contra el patrimonio.
Pese a ello el problema se trasladó
a otras estaciones como Colegio de Ingenieros y Ciudad
Universitaria.
6 detenidos por la
PNB
Producto de estas acciones
vandálicas resultaron detenidas 6 personas por la PNB, tal como lo
informó el viceministro del Sistema Integrado de Policía y director
de ese organismo de seguridad, Luis Fernández.
El Metro de Caracas reitera el
llamado a los usuarios a cumplir en todo momento las normas y a
sumarse al cuido de las instalaciones. Es importante
recordar que el daño a los trenes atenta contra el patrimonio
público y ocasiona retrasos, pues de acuerdo con los
protocolos establecidos hay que desalojar inmediatamente el tren y
llevarlo hasta los patios y talleres para aplicarle el
mantenimiento respectivo.
El buen servicio del Metro no sólo
depende de las autoridades y trabajadores de la empresa. Es una
tarea que también depende de los usuarios.