La ampliación de la Línea 2 de Metro
de Madrid desde La Elipa a Las Rosas, inaugurada por la presidenta
regional, Esperanza Aguirre, en marzo de 2011, ha sido la línea que
más viajeros ha sumado el pasado año al conjunto de la red. En
concreto, más de dos millones y medio de personas han viajado por
las cuatro nuevas estaciones de La Almudena, Alsacia, Avenida de
Guadalajara y Las Rosas, sumando más de un 15% de viajeros en esta
línea con respecto a 2010.
Por su parte, la Línea 11 es la
segunda que más usuarios ha registrado, con un 14% más de viajeros
con respecto a 2010, gracias a la ampliación hasta la nueva
estación de La Fortuna. Esta estación fue inaugurada en mayo de
2010 y tras su apertura ha sido utilizada por medio millón de
personas.
En términos generales, la red de Metro
de Madrid ha experimentado un aumento de la demanda del 1,2%,
alcanzando la cifra de los 634,8 millones de viajeros en 2011.
Además de los más de tres millones de viajeros que han sumado las
nuevas estaciones de la Línea 2 y la Línea 11, también se ha
registrado un aumento de usuarios en las líneas 9 y 10. Por
estaciones, las que más crecieron el pasado año en comparación con
2010 fueron las de Manuela Malasaña, en la línea 12; Ópera, en la
línea 5; y La Peseta, en la línea 11.
Cifras para de
record
El suburbano madrileño, con 283
kilómetros de red y 300 estaciones, es el tercer Metro del mundo en
extensión, tras Nueva York y Londres. Igualmente, es uno de los
metros más accesibles, con 1.691 escaleras mecánicas y 508
ascensores, gracias a la apuesta por la accesibilidad que el
Gobierno regional y Metro de Madrid han venido desarrollando en los
últimos años con el objetivo de garantizar que todos los ciudadanos
sin excepción puedan disfrutar del transporte público y acceder a
él sin ningún tipo de barreras.
Con este objetivo, las recientes
ampliaciones de la red de Metro desarrolladas por la Comunidad de
Madrid, que han supuesto la construcción de 100 nuevos kilómetros,
han concedido un lugar protagonista a la accesibilidad, tanto para
garantizar el acceso a personas con movilidad reducida como para
facilitar los desplazamientos a quienes sufran algún tipo de
discapacidad visual o auditiva. De este modo, por ejemplo, todas
las nuevas estaciones y aquellas antiguas que han sido remodeladas
cuentan con pavimentos guía podotáctiles para personas invidentes,
apoyos isquiáticos para viajeros con movilidad reducida, o
indicadores de braille.
Todas estas medidas se suman a otras
interesantes iniciativas que Metro de Madrid realiza en materia de
innovación, eficiencia energética y respeto medioambiental, que
repercuten directamente en la calidad del servicio y convierten al
suburbano madrileño en la opción de movilidad preferida por los
madrileños.