l contrato, de un importe de veintisiete millones de euros, permitirá prolongar en quince años, hasta 2030, la vida útil de los vehículos y mejorar las condiciones de transporte de los 20.000 pasajeros que los utilizan diariamente.
Los trabajos de modernización y certificación de los trenes que se entregaron en 1997, terminarán en 2015 y se llevarán a cabo en la fábrica de Borsigstrasse, en Brunswick, especializada en servicios para trenes de viajeros.
La modernización afectará especialmente a las puertas y los asientos y a la pintura exterior. Asimismo, se equipará a los vehículos con tomas de corriente, pantallas de información y cámaras de seguridad y se habilitará un espacio para sillas de ruedas.