La línea 1 del Metro de Sevilla se puso en marcha en abril de
2009 y ya ha superado las mejores previsiones en facturación y
demanda. Pero, ¿qué efectos ha tenido en las saturadas carreteras?,
¿cómo contribuyó a reducir la contaminación ambiental? Como mínimo,
6.833 coches dejaron de circular cada día por Sevilla y su área
metropolitana gracias al Metro. Sólo en 2011, este transporte
eliminó 2.494.223 desplazamientos en vehículo privado. Y eso
tirando a la baja, según la Agencia de Obra Pública de la Junta.
Según los datos de demanda de viajeros de 2011, la primera línea
del Metro transportó a casi 15 millones de pasajeros (14.965.336)
durante ese año, una cifra récord que se traduce también en un
éxito desde el punto de vista medioambiental. Los técnicos de la
Agencia de Obra Pública toman como base la ratio de captación de
pasajeros que antes usaban el coche (el 20% de los usuarios, según
la metodología empleada por varios suburbanos españoles) y dividen
esta cifra por la ocupación media de un automóvil en el área
metropolitana ¬1,2 personas por cada coche¬, obteniendo como
resultado que durante 2011 la línea 1 contribuyó a eliminar 2,5
millones de desplazamientos en vehículo privado por el itinerario y
los accesos al trazado del Metro (Mairena del Aljarafe-San Juan de
Aznalfarache-SevillaDos Hermanas).
Eso sí, el cálculo de que un 20% de los viajeros del Metro
usaban antes su coche para ir a Sevilla o al área metropolitana es
bastante conservador. Los técnicos de la Junta alegan que se
atienen a los datos de diferentes encuestas, pero circunscribiendo
este cambio de modo de transporte (del coche al Metro) a aquellos
usuarios que hacían un uso “real” del vehículo privado con
anterioridad. No se tiene en cuenta a aquellos usuarios que afirman
en sus respuestas que “podrían” ir en vehículo privado, ya que no
certifican si realmente empleaban antes el coche. Con todo, de
acuerdo con estos datos, la línea 1 del Metro eliminó cada día
6.833 coches que circulaban por Sevilla y su área metropolitana. A
esto hay que unir que el tren de Cercanías del Aljarafe, el C-5
Sevilla-Benacazón, que arrancó el pasado marzo y retiró de las
carreteras una media de 2.272 coches diarios, algo que incide en El
pasado año la línea 1 del Metro registró casi 15 millones de
viajeros, un 8,8% más que en 2010.
La saturada A-49, la carretera que soporta una densidad de
tráfico mayor en la provincia con picos de entrada de la capital
hispalense de entre 60.000 y 70.000 desplazamientos al día en
jornada laboral ¬y en un solo sentido¬. Eso sí, mientras que la
Agencia de Obra Pública es conservadora y considera que un 20% de
sus usuarios usaban antes el coche, en el caso del Consorcio de
Transportes del Área Metropolitana de Sevilla se estima que el 95%
del total de usuarios del Cercanías del Aljarafe llegan a la
estación en coche privado, dejando en un segundo plano los
desplazamientos a las estaciones a través de las líneas de
autobuses.
HUELLA MEDIOAMBIENTAL Este menor volumen de tráfico rodado que
posibilita el Metro de Sevilla y el empleo de energía eléctrica en
lugar de derivados del petróleo genera también una huella
medioambiental muy favorable: se reducen las emisiones de dióxido
de carbono. Mientras el metropolitano emite 5.048.090 kilogramos al
año, un autobús para un viaje equivalente genera 707.112 y los
coches, 7.576.201. Así que el ahorro de emisiones gracias al Metro
es de 3.235 toneladas al año, según los cálculos de los expertos.
El balance de 2011 de la línea 1, puesta en marcha en abril de
2009, confirma su éxito, aunque los datos también apuntan a que
puede crecer más y que el servicio puede mejorar en las horas
punta. En cuanto al número de viajeros, es el suburbano del país
que más creció, de ahí que sus responsables indicasen que es “una
isla en plena crisis”.
La Junta aportará en 2012 más de 50 millones a la línea 1 para
sufragar, por ejemplo, el préstamo del Banco Europeo de Inversiones
y la subvención de explotación, ya que el billete costaría 3,60
euros (y no 0,80 con el bono) sin la ayuda pública. Eso sí, por
primera vez en 2011 la Sociedad Metro de Sevilla ha superado sus
previsiones económicas y obtendrá más de dos millones de euros
netos de beneficios. La puesta en marcha de la línea 1 del Metro ha
contribuido en la medida de lo posible a que los accesos a la
ciudad estén menos saturados de tráfico y, por ende, ha supuesto
una reducción en la contaminación atmosférica. De hecho, según los
cálculos de la Agencia de Obra Pública de la Junta, el
funcionamiento de la línea que une Mairena del Aljarafe, San Juan
de Aznalfarache, Sevilla y Dos Hermanas contribuyó en 2011 a
retirar del medio ambiente la emisión de 3.235 toneladas de CO2,
dióxido de carbono, una canticadas ahora, algo a lo que también ha
contribuido la crisis económica, que dejó sin trabajo a miles de
personas.
En 2011 se registraron 14,96 millones de viajeros liquidables
(descontando los desplazamientos de operarios y supervisores) en la
línea 1 del Metro de Sevilla, lo que supone un 8,87% más que el año
anterior, cuando el promedio de crecimiento del resto de
metropolitanos del país fue del 1,5%. Unos datos que, junto con los
beneficios ambientales, avalan que se construyan las líneas ya
proyectadas 2, 3 y 4. dad que equivalente a los efectos positivos
que para la protección del medio ambiente tendría la plantación de
15.000 árboles en Sevilla. Además, hay que subrayar que también
existe un beneficio vinculado a la menor ocupación de viario
público para el transporte de viajeros, ya que una unidad de Metro
tiene una capacidad de transporte de más de 220 personas, que si
empleasen el coche privado para efectuar el mismo trayecto
equivaldría a 183 vehículos privados para movilizar al mismo número
de personas. Las carreteras están menos atasUn efecto ambiental que
equivale a la plantación de 15.000 árboles El apunte Tirando a la
baja, se considera que un 20% de los usuarios del suburbano usaba
antes el automóvil para desplazarse La línea 1 del Metro elimina
6.800 coches al día del área metropolitana.