Metro de Londres tiene previsto convocar la licitación de esta flota el año que viene. La compañía necesita cien trenes para las líneas Piccadilly y Central; cuarenta trenes para la línea Bakerloo y diez trenes para la línea Waterloo & City.
Estos serán los primeros trenes que incorporen aire acondicionado en las denominadas líneas “Tubo”, que poseen un gálibo muy restrictivo. Las zonas de interconexión, más anchas permitirán a los viajeros recorrer los trenes, lo que mejorará la distribución de los viajeros y ofrecerá mayor capacidad frente a los trenes existentes.
Junto con la introducción del Control de Trenes Basado en Comunicaciones (CBTC) en cada línea, Metro de Londres confía en aumentar la capacidad en las líneas Central y Bakerloo en un 25 por ciento; en la línea Waterloo & City, un 50 por ciento; y en la línea Piccadilly, un 60 por ciento.
Línea Piccadilly, a la que se destinarán cien trenes.