Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) recicla el 60 por
ciento del agua que utiliza para el lavado de los tranvías en sus
instalaciones de Metrovalencia. El proceso de limpieza, que tiene
lugar en los talleres de Naranjos que acogen las unidades de las
Líneas 4 y 6, significa un ahorro anual de350.4 metros cúbicos de
agua.
Este sistema de reciclaje se realiza a través de una depuradora
situada en la parte soterrada de la plataforma por donde circula el
tranvía para ser lavado, y tiene como objetivo recoger y
transformar el agua sucia de residuos proveniente del lavado, en
líquido con mejores características de calidad.
En los talleres de Naranjos, se lavan una media de cuatro-cinco
tranvías diariamente y dos-tres en fin de semana y festivos, lo que
supone una media semanal de cuatro lavados al día. Teniendo en
cuenta que se utilizan400 litros por lavado y vehículo, la media de
agua utilizada a lo largo de una jornada es de1.600 litros.
Cabe destacar que el ahorro diario de agua es de960 litros, ya
que de cada diez litros utilizados son reutilizables seis gracias a
la depuradora. El agua empleada anualmente se concreta en584.000
litros o, lo que es lo mismo,584 m3, por lo que el ahorro de agua
total es de350,4 metros cúbicos.
Material móvil tranviario
El número de tranvías existentes en el
parque móvil de Metrovalencia asciende a 44 vehículos, divididos en
las 25 unidades de la empresa Siemens modelo 3.800 y las 19 de la
firma Bombardier modelo 4.200.
Las primeras se pusieron en circulación en 1994 coincidiendo con
la reimplantación en Valencia del sistema de transporte tranviario,
que había desaparecido en los años 70 del pasado siglo, y son
empleadas actualmente en la Línea 4 (Doctor Lluch-Mas del Rosari).
Por su parte, las segundas están en funcionamiento desde 2006 y
2007 y prestan servicio en la Línea 6, (Marítim Serrería-Tossal del
Rei) y en la prolongación tranviaria de la Línea 5
(Marítim-Serrería-Neptú).
Certificado de calidad medioambiental
FGV recibió el pasado año el certificado ISO 14001 de gestión
ambiental de la empresa AENOR por su equilibrio entre el
mantenimiento de la rentabilidad y la reducción de los impactos en
la naturaleza y de la presentación del balance de actuaciones
medioambientales de la empresa pública desde que hizo pública en
2006 su Declaración de Sostenibilidad.
Además, FGV tiene un decidido compromiso por el desarrollo
sostenible, que se ha concretado en la elaboración de distintas
acciones enmarcadas su Declaración de Sostenibilidad de 2006, la
incorporación al Foro de las Empresas Ferroviarias por la
Sostenibilidad, también en 2006, o la adhesión a la Carta de
Sostenibilidad de la Unión Internacional de Transporte Público
(UITP) en 2007.